Tu pelo, brillante y fuerte de nuevo

Un pelo bonito es algo importante para todo el mundo porque forma parte de nuestra imagen personal. La manera en la que nos peinamos es algo más que colocar el pelo cada mañana, es un reflejo de nuestra personalidad y nos ayuda a mostrarnos de cara al exterior tal y como queremos que nos perciban. Por eso, cuando el pelo se cae con frecuencia, se ve sin brillo o comenzamos a perderlo en diferentes grados, puede ser un problema muy grave para nosotros.

Cuando esto sucede hay que acudir a un dermatólogo especializado en tratamientos pelo Vigo que estudie de manera individualizada qué está pasando con nuestro pelo y por qué está pasando. Muchas persona acuden porque quieren que el pelo vuelva a brillarles, pidiendo un champú que consiga darles ese toque especial. Pero resulta que la falta de brillo no se debe a que el champú que usan no sea el adecuado, sino a que les falta una vitamina, o que sufren una anemia. Por eso es tan importante averiguar la causa detrás de los síntomas que estamos viendo.

Una vez que el dermatólogo ha identificado el problema podrá ayudarnos con la solución. En algunos casos puede que no podamos tener una solución definitiva al problema, como en el caso de algunas caídas de cabello. Quizás solo podamos conseguir que el pelo no caiga tan rápido pero no que deje de caer. Pero incluso en casos así se pueden dar soluciones alternativas como los trasplantes de cabello, que harán que se recupere el pelo en las zonas perdidas logrando un resultado totalmente natural.

Algunos problemas de cabello si pueden venir del uso de productos poco adecuados, como por ejemplo modas de Internet como las de lavar el pelo con champú para caballos. Este tipo de productos no son adecuados para el cabello humano y no vamos a conseguir tener un pelo más bonito, sino que incluso podemos dañar el cuero cabelludo por usar algo con un pH que no es el indicado.

Otros problemas, como las calvas o algunas caspas pueden ser fruto de nervios o de estrés, por lo que habrá que combinar el tratamiento dermatológico con un tratamiento psicológico para ayudar a gestionar estas emociones, ya que de lo contrario es muy complicado mejorar al no actuar en el fondo real del problema, siendo el pelo solo un síntoma más.