Los estores están sustituyendo en gran medida a las cortinas de toda la vida porque resultan más modernas y se adaptan muy bien a las viviendas prácticas y actuales. No necesitan tantos cuidados como las cortinas ni tampoco ocupan tanto espacio, lo que es particularmente interesante. Pero, además, existen tantos modelos de estores que siempre se pueden adaptar a cualquier decoración y habitación de la casa.
Comprar los mejores estores sin salir de casa es muy sencillo ya que Internet nos ofrece un acceso directo y las veinticuatro horas del día a tiendas como decorestor en la que podemos encontrar estores de cualquier tipo para nuestro hogar, con calidad y con todas las garantías de los mejores comercios. Además, nos llegarán a casa sin tener que molestarnos y solo tendremos que colgarlos para disfrutar de los mismos.
En las tiendas convencionales de fabricación de estores nos encontramos con que la persona que viene a casa a tomar las medidas nos ofrece ya un modelo de estor, con frecuencia uno de alta gama y coste. No siempre podemos escoger estores como los enrollables, que son muy cómodos y absolutamente prácticos para estancias como un dormitorio infantil o la cocina. Y no podemos escogerlos simplemente porque son económicos y no es necesario una fabricación artesanal, es decir, no hay que coser.
Además, estas tiendas nos traen los estores a casa y los cuelgan, nos dicen que sin coste alguno. Esto puede parecer una gran ventaja, pero cuando vemos los presupuestos que ofrecen queda claro que el coste está más que incluido en el estor, ya que estos son muchísimo más caros que los que se pueden comprar en una tienda online como la mencionada. Pero ¿merece la pena pagar más? ¿Se nota realmente la diferencia?
Cada uno puede verlo por su cuenta, pero lo cierto es que no se nota una gran diferencia excepto a la hora de abonar la factura, donde sí que es más que evidente. Y teniendo en cuenta que es posible incluso encargar estores personalizados tanto en diseño como en medida en la tienda online, ¿por qué pagar de más por algo que podemos obtener más barato y con la misma calidad y belleza? Y, además, escogiendo lo que nos gusta sin que nadie trate de influir en nuestra decisión para vendernos aquello que quieren vender y no lo que realmente queremos comprar.