Cuando vemos tarifas movil baratas es normal que nos preguntemos si se esconde algo tras la oferta. No nos referimos a tarifas baratas dentro de lo normal, sino más bien a las ofertas que parecen demasiado buenas para ser ciertas. Estos son los trucos que, habitualmente, encierran este tipo de ofertones:
-No incluyen el IVA. A veces vemos precios más baratos de lo normal, pero lo que pasa es que no incluyen el IVA, una vez que le sumamos los impuestos vemos que, en realidad, los precios son iguales o más altos que los de la competencia.
-No incluyen el fijo. Te dan el precio que te van a cobrar por las llamadas pero no te dicen que hay un precio fijo que tendrás que pagar todos los meses. Al ocultarte este dato todo se ve de color de rosa pero una vez que se conoce, suelen ser precios estándar o incluso altos.
-No incluyen el establecimiento de llamada. Otra forma de no indicar las tarifas fijas es contar lo que valen las llamadas por minuto pero no decir cuánto va a costar el establecimiento de llamada. Si la persona es un poco novata en estos temas no se dará cuenta de que se está ocultando este dato y pensará que está ante una tarifa mucho más barata que la suya cuando, en realidad, no tiene por qué ser así.
-El precio es una promoción. En otros casos, el precio que te dan es completo e incluye el IVA, pero se trata de una promoción para dos, tres o seis meses como máximo. Pasado este tiempo el precio se eleva bastante. Lo malo de esto es que este tipo de promociones traen acarreadas permanencias, por eso, si no lees la letra pequeña, es fácil que contrates pensando que has encontrado un chollo y, una vez que se acaba la promoción, tengas que continuar con la compañía muchos meses más, pagando por encima de lo que abonarías en cualquier otra.
Para evitar todos estos problemas hay que pedir siempre el precio final del producto e indicar que se quiere saber cuánto se va a pagar realmente, con el IVA, establecimiento y todos los gastos fijos que pueda haber. Una vez que respondan a esa pregunta se debe de exigir saber si es un precio promocional y cuánto habrá que pagar una vez que la promoción termine.