Las empanadas gallegas tienen fama por ser de las más ricas. El secreto está en la calidad de los ingredientes, ya que muchas de ellas se elaboran con pescados recién llevados a los puertos gallegos. Pero es posible lograr esta calidad gracias a los productos en conserva con la misma procedencia, que hacen que el sabor de los alimentos sea el mejor.
Un ejemplo es la empanada de berberechos elaborada con una Conserva gourmet de Berberechos al natural de las rías gallegas. Un plato delicioso que puedes cocinar en tu casa si tienes paciencia o alguna ayuda de la tecnología.
El primer paso es elaborar la masa del pan. Si tienes un robot amasador será muy fácil, pero si no te tocará trabajarla a mano. Puedes hacerla con harina de trigo, pero si quieres un sabor muy especial, recomendamos dos partes de harina de maíz, dos partes de harina de centeno y una parte de harina de trigo.
En total, necesitas medio kilo de harina, 15 gramos de levadura y aproximadamente 400 ml de agua. Asegúrate de que las harinas estén bien mezcladas antes de añadir la levadura derretida en el agua templada. Trabaja la masa hasta que no se pegue en absoluto. En ocasiones puedes necesitar un poco más de agua o un poco más de harina ya que las proporciones no son exactas.
Deja que la masa crezca mientras preparas un sofrito con pimiento, cebolla y ajo. Usa aceite de oliva virgen y cuando esté doradito añade un toque de perejil y pimentón. Añade los berberechos para que cojan gusto. La cantidad de sofrito y de berberechos son al gusto de cada persona ya que hay quién quiere que la empanada tenga mucho relleno y hay quién prefiere que sea muy fina.
Pasados tres cuartos de hora es el momento de estirar bien la masa. Reserva un pedacito de la masa y el resto córtala en dos partes, una ligeramente más grande que la otra y extiende primero la que es mayor. Cuando está bien estirada sobre la bandeja en la que va a ir al horno es el momento de colocar el relleno. Extiéndelo por toda la masa dejando un borde de dos dedos todo alrededor.
Extiende la otra mitad de la masa y colócala encima, dejando los dos dedos sin relleno fuera. Pliega estos bordes hacia arriba y úsalos para dejar totalmente cerrada la empanada. Haz un agujero en el medio de la empanada y pincha toda la empanada con un tenedor. Con la masa que has reservado haz un aro para adornar el agujero del centro. Hornea a 180 grados durante aproximadamente 45 minutos.